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Claves para vencer el miedo

El miedo es una reacción normal ante el diagnóstico de un ser querido. Es difícil no preocuparte por tu ser querido y por cómo afrontará los cambios en su vida. Sin embargo, el miedo y la preocupación también pueden obstaculizar tu capacidad para afrontar la vida después de un diagnóstico de Alzhiemer o demencia.

El miedo puede impedir tu capacidad para afrontar el diagnóstico de un ser querido

El miedo puede causar estrés y ansiedad, lo que puede llevarte a experimentar síntomas físicos como dolores de cabeza y náuseas. También afecta a los patrones de sueño, dificultando un sueño reparador por la noche.

Si no se controla, el miedo puede provocar depresión u otros problemas de salud mental que te dificulten afrontar el diagnóstico de tu ser querido, así como otros aspectos de la vida, como las responsabilidades laborales o escolares.

Acepta que el miedo es normal

El miedo es una reacción normal ante lo desconocido, por lo que es importante aceptar que el miedo forma parte de la experiencia humana. El miedo puede ser útil si te motiva a hacer algo o a actuar en tu vida, pero cuando te paraliza y te impide actuar, se convierte en algo destructivo.

El miedo no es un signo de debilidad, sino la prueba de que eres humano. No te desanimes por sentir miedo o ansiedad ante algo nuevo o diferente, simplemente reconoce que estas emociones forman parte del ser humano y acéptalas como tales.

No te aísles de los demás

Es importante que mantengas tus relaciones con amigos y familiares, aunque no sepan cómo ayudarte a afrontar tu miedo. También debes intentar seguir haciendo vida normal en la medida de lo posible, aunque esto signifique salir a lugares públicos que te incomoden o visitar a la persona enferma de Alzheimer o demencia (si quiere recibir visitas).

Busca apoyo o ayuda profesional si la necesitas

Habla con otras personas que tengan seres queridos con la enfermedad, busca el apoyo de familiares y amigos.

Si luchas contra el miedo y la ansiedad, puede ser útil buscar ayuda profesional. Hablar con un terapeuta, un médico o un grupo de apoyo puede ayudarte a desarrollar mecanismos de afrontamiento que te funcionen.

Superar el miedo lleva tiempo y práctica, pero puede hacerse día a día

Superar el miedo no es fácil, pero es posible. El miedo puede ser abrumador y paralizante, pero puedes empezar a superarlo dando pequeños pasos cada día.

Una de las cosas más importantes que hay que recordar es que superar el miedo requiere tiempo y práctica. No esperes cambiar de la noche a la mañana: pasarán meses o incluso años antes de que tus miedos desaparezcan por completo. Pero si sigues trabajando día a día, te resultará más fácil afrontarlos en la vida cotidiana que antes.

No existe una fórmula mágica para superar el miedo, pero hay algunas cosas que puedes hacer para que te resulte más fácil. En primer lugar, acepta que el miedo es normal e intenta no juzgarte por sentirte así. En segundo lugar, dedica tiempo cada día a ti y a tu ser querido para no sentirte abrumado por todo lo que ocurre a la vez. Por último, busca el apoyo de otras personas que hayan pasado por situaciones similares para que puedan guiarte en estos momentos difíciles.