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La importancia de ser personas activas cuando el diagnóstico de Alzheimer o demencia te toca de cerca

No es fácil enfrentarse a un diagnóstico de Alzheimer o demencia cuando se trata de un familiar cercano. Si cuidas a un ser querido con Alzheimer o demencia, dedicar tiempo a hacer ejercicio juntos puede ayudar mucho a que ambos os mantengáis sanos.

Los expertos afirman que el ejercicio es esencial para mantener la salud mental y física

Un número creciente de investigaciones demuestran que la actividad física regular puede ayudar a reducir el estrés y la ansiedad, mejorar la calidad del sueño y aliviar la depresión entre las personas con demencia o enfermedad de Alzheimer (EA). Además de estos beneficios para la salud mental, el ejercicio también está relacionado con tasas más bajas de enfermedades cardiovasculares y diabetes, así como con una mejora de la fuerza y el equilibrio, que puede ayudar a prevenir caídas.

Tus propios hábitos pueden ser contagiosos, ya que influyes en el comportamiento de tu ser querido modelando un estilo de vida saludable

La mejor manera de empezar es haciendo pequeños cambios en tu propio comportamiento, como comer mejor y hacer más ejercicio. También puedes animar a tu ser querido a hacer estos cambios dándole tu apoyo, proporcionándole comentarios positivos cuando demuestre buenos hábitos y ofreciéndole ánimos cuando tenga dificultades.

Si tu ser querido tiene Alzheimer o demencia, la rutina puede ser muy importante, así que intenta integrar en su horario actividades que os pongan en movimiento a los dos. No tengas miedo de hacer cosas que parezcan tontas, siempre que sean divertidas para vosotros. Por ejemplo: jugar al Twister o bailar en el salón puede hacer que los dos os mováis y riais, ¡aunque solo sea durante unos minutos!

Los cuidadores deben encontrar formas de incorporar la actividad física a sus vidas, encontrando un equilibrio entre el cuidado de los demás y el cuidado de sí mismos

Es fácil dejarse atrapar por las tareas cotidianas de cuidar a una persona con Alzheimer o demencia, pero es esencial que los cuidadores saquéis tiempo de vuestra agenda, aunque solo sea una vez a la semana, para hacer algo divertido. Salir a pasear por el vecindario con tu ser querido, ir juntos en bicicleta, jugar en casa a juegos como el bingo o las cartas…

Sabemos que cuidar a una persona con Alzheimer o demencia puede ser abrumador

Es importante cuidarse para poder seguir cuidando a tu ser querido y proporcionarle el apoyo que necesita. El ejercicio es una forma estupenda de hacerlo, ya que ayuda a mejorar el estado de ánimo y a aliviar el estrés y la ansiedad, cosas con las que luchan los cuidadores y cuidadoras. Pero no te preocupes si no puedes hacer ejercicio todos los días. Incluso pequeñas cantidades de actividad, como pasear juntos, pueden ayudar mucho a mantener a ambas partes sanas y felices.